Cuando hablamos de limpieza profunda estamos destacando que cada profesional, en base al diagnóstico / exámen realizado, armará una propuesta para personalizar cada sesión y un diagrama de trabajo en gabinete, cabina o consultorio.
Es primordial desde la higiene utilizar diversas opciones para combinar técnicas mecánicas y químicas. siempre a favor del cuidado integral de la piel. Es decir, tener pleno conocimiento y respeto en la selección de elementos y procedimientos que complementen nuestro protocolo de trabajo.
Puntos clave
– Entender las necesidades cambiantes de la piel dependiendo de las condiciones.
– Mantener el manto hidrolipídico equilibrado colaborando en el control de la producción grasa y evitar exceso de sequedad.
– Tener en cuenta las condiciones climáticas ambientales y las actividades que realice el paciente / cliente / usuario, en especial el ejercicio físico y la exposición solar- lumínica.
– Siempre observar qué tratamientos tópicos y sistémicos pueda estar utilizando frecuentemente, y estar atento a estas pautas.