Años después de que la palabra metrosexual se instaló en la sociedad, ya no sorprende que los hombres se hagan las manos o saquen turno para una limpieza de cutis.
Pero esta tendencia acaba de ir un paso más allá e ingresar en un terreno que antes estaba reservado a las mujeres: el cavado profundo.
Este tratamiento –que al igual que la versión femenina extrae todo o parte del vello púbico– se está volviendo cada vez más popular y no sólo para el caso de nadadores profesionales o modelos de ropa interior.
“Estamos descubriendo que todo el mundo se lo hace”, reconoció Mike Indursky, presidente de la cadena norteamericana de spas Bliss, que ofrece por 125 dólares un método brasileño para los hombres, llamado Ultimate H-Wax.
Algunos hombres recurren al cavado profundo por el efecto de agrandamiento de los órganos genitales.
