Aunque las pieles parecen ser semejantes desde el punto de vista anatómico, funcional y bioquímico, existen variaciones entre las mismas que necesariamente se debe tener en cuenta en la formulación de productos dermatocosméticos.
El pH de la piel del bebé, que a los pocos días de nacer es de 5.5, actúa como defensa natural contra bacterias y es la llamada piel eudérmica.
Generalmente, nace con un tipo de acné llamado acné neonatorum, ya que las glándulas sebáceas se forman entre la 8° y 9° semana de gestación e inmediatamente comienzan a funcionar.