Hacer ejercicios faciales es una forma natural de mantener el rostro radiante, luciendo joven y sintiéndose fresca.
Cuando se empiezan a practicar los ejercicios faciales se recomienda hacerlos todos los días hasta acostumbrarse; luego, se pueden realizar tres veces por semana.
A continuación algunos ejercicios que ayudan a mantener los músculos faciales más flexibles.
Ejercicios para los ojos
Los ojos se estresan bastante con muchas horas de exposición a la tv y a la computadora, por ejemplo. Por ello que hay que relajar los músculos de los ojos.
Para eso, hay que sentarse en una posición erguida, cerrar los ojos y mirar hacia abajo lo más lejos posible.
Luego, hay que abrirlos una vez más y mirar bien lejos.
El paso siguiente es levantar las cejas lentamente y mantenerlas levantadas un tiempo mientras estemos cómodos.
Ejercicios para la frente
La frente ciertamente necesita atención, ya que todas las arrugas de la vejez aparecen allí para que todos las vean.
Para relajar los músculos de la frente, hay que sentarse en una posición erguida y bajar las cejas.
Cuando se realiza esta acción se debe fruncir la nariz cerca de diez veces.
Este ejercicio debe hacerse al menos cinco veces.
Otro ejercicio relajante es echarse horizontalmente en la cama y mirar hacia el techo. Mientras se mira, se levantan las cejas y se repite la acción diez veces.
Ejercicios para las mejillas
Los ejercicios faciales ayudan a relajar los músculos de las mejillas, que son una parte muy notoria de la cara.
Las mejillas caídas son antiestéticas, es por eso que debemos cerrar los labios de una manera relajada y moverlos en forma de “puchero”.
Esto debe hacerse cerca de diez veces.
Otro ejercicio es sonreír contando hasta cinco y luego relajar.
Ejercicios para los labios
Se deben fruncir los labios porque esto hace que se junten las comisuras.
Se cuenta hasta cinco y luego se relaja.
Esto debe hacerse cinco veces.
Otro ejercicio es cerrar los labios y fruncirlos (como en un gesto de desprecio).
Esta posición debe mantenerse hasta la cuenta de diez.
Invertir algunos minutos diarios
Los ejercicios faciales son una forma económica de mantener un look joven y de mejorar la apariencia del rostro. No sólo porque no cuestan un centavo, sino porque tampoco es un método invasivo.
Hacer este tipo de ejercicios regularmente ayuda a ver resultados pronto, porque estimula los músculos de la cara y mantiene la piel en su lugar. Esto es: menos arrugas y signos de envejecimiento. Además, libera estrés y tensión.
Todo lo que se necesita para realizarlos es algunos minutos durante el día, en la comodidad del hogar.
Por supuesto que también es un excelente complemento para los tratamientos de belleza que realizan las mujeres habitualmente en los gabinetes y centros de estética.
