Manifestaciones del fotoenvejecimiento
El fotoenvejecimiento se caracteriza por:
– Disminución del grosor de la epidermis.
– Reducción de la cohesión de los corneocitos.
– Menor número de melanocitos.
– Aplanamiento de la interfase dermoepidérmica.
– Modificaciones en la estructura fibrilar de la dermis.
– Disminución en el número de fibroblastos.
– Alteraciones vasculares.
Estos cambios originan una piel fina, deshidratada, con arrugas de expresión, arrugas estáticas, máculas, bolsas de ojos, ojeras y labios más finos.