La cirugía estética se ha venido desarrollando a lo largo de unas pocas generaciones.
Hacia los años ’40, cuando Norma Jean comienza su transformación hacia Marilyn Monroe, la cirugía estética era un campo primitivo.
En las últimas siete décadas ha evolucionado hasta un punto en que los procedimientos sofisticados de última generación, no son como sus versiones primitivas. Se llevan a cabo de manera diferente, utilizando nuevas técnicas y nuevos conocimientos de anatomía y fisiología.
Los procedimientos actuales se ven y se sienten diferentes, y producen mucho mejores resultados que los de antaño.
Los primeros lifting faciales estiraban la piel en un intento de hacer que se viera más joven, pero distorsionaban la expresión facial y daban como resultado un rostro tipo máscara.
Hoy, por suerte, estas técnicas están totalmente obsoletas.
Lo que sigue siendo cierto, es que la mayoría de la gente quiere verse tan bien como se sienten en su interior, pero con cambios sutiles y sin transformaciones dramáticas.
Los liftings de hoy en día no son sólo para celebrities, sino que ayudan a personas de todos los ámbitos a ganar confianza en su trabajo y en su vida privada. Tanto hombres como mujeres se sienten más seguros cuando saben que se ven bien.
Antes y después del lifting facial.
El estiramiento facial estándar desde hace unos años es el lifting SMAS.
Esta técnica recibe su nombre por el sistema músculo aponeurótico superficial, una lámina o capa de tejido conectivo fibroso que se encuentra debajo de la grasa facial.
“La capa SMAS de la cara separa las estructuras más profundas del rostro (los músculos del movimiento facial, nervios y otras estructuras) que no son tan afectados por el proceso de envejecimiento, del tejido blando de la cara”.
Este lifting tipo SMAS fue claramente una mejora con respecto al estiramiento de piel solamente, aunque tiene un efecto menor en los tejidos más profundos de la cara. Y es por eso que todavía puede requerir tirar un poco de la piel para lograr buenos resultados “.
El lifting tipo SMAS ayudó a la comunidad de cirugía estética a apreciar los beneficios del reposicionamiento del tejido profundo.
Posteriormente, las ideas siguieron desarrollándose y dieron paso a una técnica más sofisticada, que es la técnica del plano profundo.
Esta técnica reposiciona esencialmente tejidos blandos debajo de la capa SMAS, liberándolos de los músculos subyacentes. “Esto significa que toda la cara se puede levantar”, y da lugar a la “creación de una mandíbula, cuello y pómulos más definidos”.
El lifting del plano profundo implica una disección limitada bajo la piel, la preservación de los vasos linfáticos y reducir al mínimo la hinchazón.
Los liftings faciales tradicionales son bastante limitados, ya que requieren gran despegamiento de la piel, lo que lo separa de los linfáticos subyacentes. Esta separación a menudo conduce a un retraso en el periodo postoperatorio debido a la hinchazón.
El lifting facial normal no podrá durar mucho tiempo y requiere revisiones en un corto período.
La tensión en la piel puede conducir a una mala cicatrización de la herida, lo que resulta en cicatrices enrojecidas y estiradas.
El lifting facial del plano profundo ofrece resultados superiores.
“El ascenso es más potente, creando una mejora duradera de la línea de la mandíbula, del cuello y de los pómulos”. No hay un aspecto ‘estirado’, ya que toda la cara se levanta de manera uniforme, y por lo tanto el resultado es muy natural.
Además, no hay tensión en la piel, lo que permite que las incisiones se curen muy rápidamente, y las cicatrices antiestéticas son muy poco probables “.
“La gente tiene la idea errónea de que el rostro pierde volumen con el tiempo y que tienen que llenar sus caras con ácido hialurónico y otros productos”. Sin embargo, los cirujanos faciales entendemos que el volumen en la cara sigue siendo el mismo a través del tiempo.
“Lo que realmente ocurre es que el continente que lleva ese volumen (nuestra piel) se hace más grande como resultado de la flaccidez”. Esta es la razón por la cual el rostro se ve como si hubiera perdido volumen.
Por lo tanto, debemos eliminar la piel sobrante de la zona inferior de la cara, y elevar el tejido fláccido a su posición normal, por ello no es necesario rellenar la cara, es suficiente con esta redistribución.
Antes y después del lifting facial.
Mientras que el lifting facial tradicional está dirigido a producir transformaciones radicales en las personas mayores, el lifting del plano profundo ayuda a un grupo más joven, a menudo todavía en sus 40 años, para frenar y atenuar el proceso de envejecimiento.
Esto significa que abre oportunidades para los jóvenes a retrasar y detener los signos de la edad con un tratamiento temprano.
Ya que estas personas están teniendo lifting faciales a una edad relativamente joven, los resultados no son dramáticos.
Estos pacientes sólo se ven con rostros más frescos para su edad.
El proceso de cicatrización continuará por varios meses, pero usted será capaz de regresar a sus actividades normales en un par de semanas.
Los abordajes más recientes reconocen que el proceso de envejecimiento se produce en todos los tejidos y capas o estratos.
Es por ello que las tendencias actuales del lifting facial y cervical procuren restaurar todas las capas (adiposa, fascial y muscular) a su posición original, más juvenil. Pero haciéndolo desde la profundidad, y no sólo desde la superficie.
